8 mitos comunes sobre la disfunción eréctil

La disfunción eréctil (DE), anteriormente conocida como impotencia, se refiere a la incapacidad persistente de lograr o mantener una erección suficiente para una actividad sexual satisfactoria. Más de 150 millones de hombres en todo el mundo experimentan algún grado de DE. Sin embargo, los malentendidos sobre esta condición pueden impedir que muchos busquen tratamiento.
Mito 1: La disfunción eréctil solo afecta a hombres mayores de 70 años.
Realidad: Aunque la DE es más común en hombres mayores, puede ocurrir a cualquier edad. Afecta aproximadamente a la mitad de los hombres entre 40 y 70 años. Si bien algunos cambios en la función eréctil son normales con la edad, la incapacidad persistente para lograr una erección satisfactoria no es una parte inevitable del envejecimiento.
Mito 2: La disfunción eréctil es molesta pero no peligrosa.
Realidad: La DE puede ser una señal de advertencia de condiciones médicas graves, como enfermedades cardíacas, diabetes tipo 2 y accidentes cerebrovasculares. Los mismos factores que contribuyen a estas enfermedades pueden causar DE. Por ejemplo, un hombre en las primeras etapas de una enfermedad cardíaca podría desarrollar DE mucho antes de experimentar síntomas cardíacos, ya que las arterias que suministran sangre al pene son más pequeñas que las del corazón.
Mito 3: La disfunción eréctil está solo en tu mente.
Realidad: Aunque factores psicológicos como la depresión, el estrés y la ansiedad pueden contribuir a la DE, muchas veces existen causas físicas. Enfermedades como la diabetes, daños en los nervios, enfermedades cardíacas y enfermedades crónicas del hígado, pulmones o riñones pueden causar DE. Además, ciertos medicamentos pueden interferir con las señales nerviosas o el flujo sanguíneo al pene.
Mito 4: La disfunción eréctil significa que hay algo mal con el pene.
Realidad: Para lograr una erección, se necesita un cerebro y pene saludables, vasos sanguíneos y nervios en buen estado, y niveles adecuados de testosterona. Si cualquier parte de este sistema se ve afectada, puede resultar en DE. Por lo tanto, una evaluación médica completa puede ayudar a determinar la causa y el tratamiento adecuado.
Mito 5: Si fallas una vez en la cama, tienes disfunción eréctil.
Realidad: Es normal tener dificultades ocasionales para mantener una erección. Sin embargo, si el problema persiste y afecta tu autoestima o vida sexual, es importante hablar con un profesional de la salud.
Mito 6: La disfunción eréctil significa que no estás atraído por tu pareja.
Realidad: Aunque los problemas de relación pueden contribuir a la DE, es más probable que la causa sea otra, como el estrés, la ansiedad, la fatiga, ciertos medicamentos o condiciones de salud.
Mito 7: Tomar suplementos de testosterona curará la disfunción eréctil.
Realidad: Los niveles bajos de testosterona pueden causar DE, pero no es la única causa. Es importante consultar con un profesional de la salud antes de comenzar cualquier suplemento de testosterona.
Mito 8: Los medicamentos son la única forma de tratar la disfunción eréctil.
Realidad: Existen múltiples opciones para tratar la DE. Además de los medicamentos, algunos hombres se benefician de dispositivos mecánicos simples, cirugía o asesoramiento psicológico. Es fundamental discutir con un profesional de la salud para determinar la mejor opción de tratamiento.